EDMUND KING HOUSE:

Campus de la Universidad de Montevallo, Alabama.

Esta casa de dos pisos fue construida por Edmund King, nacido en Virginia en 1782, que llegó a Alabama en 1817.

Primero, en 1823, construyó una cabaña de troncos, donde trajo a su familia, una enfermera y 15 esclavos. Después de convertirse en un exitoso hombre de negocios en 1851, donó tierras para iglesias, carreteras y escuelas, incluida la Escuela Industrial para Niñas de Alabama (hoy conocida como la Universidad de Montevallo). 
A King le encantaba el dinero: ganarlo y contarlo. Pero no era avaro. Sus vecinos podían contar con él cuando había necesidad. Muchos huérfanos se refugiaron en King House.

Tras su muerte en 1863, la casa pasó a un yerno y fue cedida a la Escuela Industrial en 1908. Hay informes contradictorios sobre cómo murió King. Algunos dicen que murió de problemas de salud a sus 82 años. Sin embargo, otros afirman que murió cuando la rama de un árbol le cayó encima mientras caminaba por su huerto.

La casa se ha utilizado como aula, edificio de oficinas, enfermería, hogar de práctica de economía doméstica y un hogar de verano para estudiantes varones. Hoy en día, la casa se utiliza como casa de huéspedes para los visitantes de la Universidad. Fue incluida en el Registro Nacional de Lugares Históricos en 1972.    

Durante la década de 1970, el exterior fue restaurado a su aspecto original. En el interior quedan la escalera original, gran parte del piso y herrajes originales y también algunos de los vidrios originales de la ventana. No muy lejos, situado junto a Harman Hall, está el cementerio de la familia King, aquí están enterrados varios miembros de la familia, incluida la primera esposa, Nancy Ragan King, que murió en 1842, a los 49 años. Su segunda esposa, Susan King, también fue enterrada aquí, después de su muerte en 1850.   

King y su esposa Nancy tuvieron diez hijos. Sus descendientes y esclavos se convertirían en parte de la tradición fantasmal de la zona, pero la historia principal sobre el espíritu de King se relaciona con la Guerra Civil.

Según la leyenda, cuando empezó la guerra civil en 1861, Edmund King enterró una suma de dinero en su huerto de melocotones, para que los soldados de la Unión no pudieran quedárselo. Las tropas federales bajo el mando de James H. Wilson ocuparon Montevallo en marzo de 1865, aunque King había muerto dos años antes. El general Wilson hizo de la casa su cuartel general. Cuando llegó la Unión, todos los hombres de la casa estaban en guerra o muertos. Solo estaban presentes las mujeres de la familia King y las esclavas. 

Ya en esta época se oían extrañas historias referente a esta casa, en algún momento durante los años de la guerra, se cocinó un cerdo entero y se quedó en la mesa. Cuando uno de los miembros de la familia clavó el tenedor en el animal, éste chilló.
Otra historia nos habla de una esclava que era una mala madre, era bien conocido el maltrato que daba a sus hijos. Un día su hijo murió y ella no parecía estar preocupada. De pronto, una forma oscura comenzó a formarse en la habitación. La criatura parecida a un buitre atacó a la madre del niño, dándole un picotazo en el cuello y en la cabeza. Se dice que la criatura era el hijo que se vengaba de su malvada madre. 

Se cuenta que se puede ver al fantasma de Edmund King por la noche contando su dinero en las habitaciones de arriba y que se lo ve deambulando por el campus con una pala y una linterna buscando su oro enterrado.

Se dice que otros espíritus andan por la casa y el cementerio cercano. Se informan de cosas misteriosas e inexplicables en la casa, como el sonido de alguien moviéndose en habitaciones vacías o el sonido de alguien contando monedas. Se dice que los espíritus mueven muebles, cortinas y se ven luces brillantes a través de las ventanas. Orbes de luz se ven fuera de los muros del cementerio.

En la noche del 4 de febrero de 1908, la estudiante de segundo año Condie Cunningham y su compañera de cuarto estaban tratando de derretir chocolate en un quemador. Cuando la segunda campanada de toque de queda sonó a las 10 de la noche, trataron de guardar el plato. El alcohol del quemador se derramó y encendió el camisón de Cunningham.

Sorprendida, corrió gritando por el pasillo y las llamas la quemaron severamente. Un miembro de la facultad extinguió el fuego pero ella murió dos días después. No mucho después de la muerte, los residentes comenzaron a reportar los gritos de una mujer joven. La madera de la puerta en el antiguo dormitorio de la joven comenzó a mostrar una cara con gesto de estar gritando. Se oye el ruido de unos pies corriendo por el pasillo y las puertas y ventanas se abren solas a voluntad.

La casa se ha convertido en un lugar de interés para los investigadores paranormales. Una trabajadora cuenta como pudo ver a un equipo de investigadores usar 138 baterías en una sola noche ya que todas se les agotaban.
Aunque hay varias entidades en toda la casa, los investigadores tienden a estar de acuerdo en que el salón es el lugar más activo, habitado por lo menos por 5 espíritus. Estos incluyen: un anciano que se cree que es King, una mujer joven, un hombre joven, un adolescente y un soldado de la Unión que ha sido visto agachado en una esquina.

En una de estas investigaciones, el grupo salió del salón dejando la puerta principal cerrada, cuando volvieron los pesados muebles estaban apilados uno sobre otro y nadie podía haber entrado. Según una sensitiva, que pudo entablar una conexión con el espíritu de un soldado yanqui, dijo que era él quien movía los muebles.

Un estudiante de segundo año, salió volando por las escaleras de la casa. Estaba visiblemente conmocionado y se negó a volver al piso de arriba. El joven explicó que vio a una criatura parecida a un murciélago colgando boca abajo en una esquina de una de las habitaciones. Cuando lo vio, cayó al suelo y comenzó a arrastrarse hacia él sobre lo que parecían ser sus codos.

Otro sensitivo había visto a una niña, de entre 7 y 9 años, con el pelo largo y rubio. La niña estaba sentada en el borde de la cama, con los pies colgando. La entidad miró a la joven y le dijo: "Tienes que irte ahora, porque él viene". 

Pero este no es único edificio embrujado en esta universidad, también está Reynolds Hall. Hay una historia sobre por qué el capitán Henry Clay Reynolds está rondando el edificio que lleva su nombre. Se dice que durante la Guerra Civil, al capitán se le asignó el deber de proteger a los hombres enfermos y heridos en el hospital confederado, que estaba en este edificio. Cuando se enteró del asedio contra la Siderúrgica de Brierfield, dejó su puesto con algunos hombres para ayudar en la batalla. Cuando regresó, descubrió habitaciones llenas de hombres masacrados, a los que podría haber salvado si se hubiera quedado. Juró no volver a dejar el edificio desprotegido en su vida y por lo visto tampoco en su muerte.
El espectro azul del capitán ha sido visto, oído y su presencia se siente deambulando por el edificio. Se sabe que sigue a los estudiantes a altas horas de la noche. Puertas y ventanas se cierran solas. Y en ciertas áreas de la sala, hay puntos fríos y áreas que dan escalofríos. De vez en cuando, la gente ha sentido una ráfaga de viento soplando a través del escenario cuando las puertas están cerradas.

Otro edificio embrujado en el campus de Montevallo es la Residencia de Mujeres Hanson Hall. La historia cuenta que el espíritu de una estricta ama de casa sigue velando por las jóvenes del dormitorio. Por lo general, toma la forma de una presencia invisible que mira por encima de los hombros de los estudiantes mientras estudian hasta altas horas de la noche. También se ha visto a su fantasma caminando por los pasillos y mirando dentro de las habitaciones.  También se le atribuye el traslado de objetos de su ubicación original.